"Yo trabajé con Rebeca en la película "Malasaña 32". Era mi primera película y también la primera vez que tenía un personaje con tanto peso. Rebeca y yo empezamos mano a mano a dar vida a "Amparo", nunca había trabajado con coach y fue una experiencia muy gratificante. Consiguió sacar cosas de mí que yo sola no hubiese podido, o quizás me hubiese sido más costoso. Trabajamos mucho desde la emoción corporal y la respiración, entre otros. En este caso al ser una película de terror yo no teníatantas herramientas para afrontar la película sola y con la ayuda de un buen coaching es increible lo que puedes llegar a mejorar, aprender, indagar y potenciar tus capacidades como actriz. Llegaba mucho más segura a rodar, con una línea de pensamiento mucho más marcada y clara y eso te hace crecer como actriz y hacer crecer al personaje. Estoy segura que mi querida "Amparo" no hubiese sido la que es si Rebe no me hubiese ayudado a fluir y creer en ella"

"Mi experiencia con Rebeca fue sumamente interesante. Susana estaba llena de secretos y momentos oscuros. Rebeca supo trasladarme el misterio y la riqueza de este personaje. Me sentí tremendamente cómoda y escucharla fue todo un honor. Química desde el primer día. Gracias Rebeca"

"Para preparar el personaje de “Lola” en Malasaña 32 contar con la ayuda de Rebeca fue absolutamente imprescindible.  A la hora de componer un personaje físicamente tan complejo, su aportación y permanente atención a los detalles fue la clave. Rebeca tiene una excelente capacidad de observación y desde ahí sabe cómo hacer crecer tu trabajo. Puntillosa, meticulosa, metódica, curranta y muy generosa con su trabajo.Honradamente pienso, que tiene todas las cualidades que una buena coach debería tener."

"Es un hecho: hasta el final de la vida, se sigue aprendiendo. Claro que para ello, hay que tener la suerte de acceder a maestras/os que tengan capacidad y voluntad de enseñar. En el año 2019, tuve la enorme suerte de conocer a una de las mejores maestras que he tenido en mi vida. Al participar en Malasaña 32 , me asignaron como coach para mi trabajo en esa película a Rebeca Medina. Excepcional en todo: como profesional, como persona, como compañera. Sabiduría, asombrosa capacidad para explicar y para transmitir, imaginación ilimitada, sensibilidad, ternura. Rebeca fue la creadora de mi personaje, yo sólo me tuve que preocupar de hacerle caso. Ese ocurre con las grandes maestras"